• ≡ Menu
  • Principal
  • Categorías
    • Nuevo
    • Estudios
    • Investigación
    • Curiosidades
    • Podcast
    • Otros
  • Galería
    • Documentación Arqueológica
    • Museo de Pontevedra
El Escriba Frustrado
  • Página principal
  • Manifiesto frustadista
  • ¿Quienes somos?
  • Contacto
Menu

Otros xNuevo Análisis iconográfico de las "bombillas" de Déndera

Análisis iconográfico de las "bombillas" de Déndera



En las criptas del templo de Hathor en Déndera podemos encontrar unos relieves que la pseudociencia se ha encargado de divulgar como la evidencia de algún tipo de tecnología perdida idéntica a la de la bombilla moderna (con su fuente de alimentación, cables y todo).


Para ello se ha defendido que, al ser una zona oscura y semi-oculta, debió de usarse iluminación eléctrica, evitando los rastros exagerados de hollín en los techos. Por ello se habría representado algo así de una manera tan explícita. Además, la imagen no dejaría lugar a dudas debido a su similitud.

La teoría ha llegado tan lejos que, si no me equivoco, se han escrito libros parcial o íntegramente acerca del tema, se ha mencionado repetidas veces en documentales, internet se ha inundado de artículos e incluso se ha realizado una exposición basada en esta teoría, en la que se reconstruyó una lámpara de este tipo (con el filamento en forma de serpiente incluso), alimentado por una serie de "pilas de Bagdad" (que difícilmente hubiesen podido conseguir la potencia para alimentar tremendo filamento).



Además de esto, comentar que existe otra teoría algo menos conocida que versa sobre que se trata de un capullo, mostrándose al gusano en el interior del mismo y colgado de una flor de loto. Todo ello de forma un tanto esquemática, presentando el capullo erguido. Esto demostraría la existencia de complejos estudios de la naturaleza animal por parte de los egipcios, que los dejarían plasmados así los resultados de tales experimentos en una zona recóndita del templo.


De acuerdo… esto último me lo acabo de inventar, pero puede servir de ejemplo de lo fácil que es inventarse una teoría de este tipo, incluso con menos incoherencias.


En fin, pongámonos serios. En cuanto a las diferentes teorías sobre iluminación, el señor Nacho Ares ya ha escrito un artículo a cerca de las posibilidades más lógicas, desmintiendo bastante bien esta teoría: http://www.nachoares.com/articulos/las-bombillas-de-dendera/

Sin embargo, desde mi punto de vista, creo que resulta más efectivo analizar estos relieves desde su punto de vista iconográfico. De otra manera, me da la sensación de estar ofreciendo alternativas a una teoría descabellada, cuando deberíamos desmontarla desde la base o, directamente, sacar conclusiones lógicas ignorando tales teorías. El arte egipcio cuenta con tres milenios de especialización y síntesis de formas y contenido. Existe un método para leer el arte egipcio y no consiste en realizar un vistazo rápido.


Leyendo los relieves


Si se pasan por alto las propiedades esenciales del arte egipcio, la lectura de los relieves está condenada de primeras al fracaso. Estos principios eliminan toda ambigüedad y dotan a la imagen de una riqueza simbólica que actúa en diferentes niveles. Por lo que, cuando se representa una serpiente, se trata de dicho animal, o a una idea referente a la idea de “serpiente” producto de la observación o la tradición.

Podemos identificar también una serie de principios rectores a tener en cuenta. En este caso cabe mencionar la transparencia, que permite apreciar lo que se encuentra dentro de una edificación (o un huevo), pese a que este sea opaco en la naturaleza.

                               Osiris en el Papiro de Hunefer se representa dentro de una 
                               capilla que se muestra transparente para poder observarlo.

También podemos hablar de la representación abatida, que permite figurar la imagen de la forma más completa y reconocible posible, y de expresión narrativa, aludiendo al hecho de reactualizar un arquetipo y mostrando una imagen que aluda a todo un acontecimiento.

Un relieve como este podemos desglosarlo para identificar diferentes iconos que, casi a modo de jeroglíficos, pueden ser leídos.

Una buena lectura, como la realizada por François Daumas, nos daría el siguiente resultado:

"Estos relieves son representaciones cosmológicas. La serpiente que sale del loto se equipara con la brillante deidad Hor-semtauy (Ihy) ya que aparece por primera vez fuera del mar primordial. Él está de nuevo representado en la parte inferior de la cripta en forma de dos serpientes que también viene adelante, pero esta vez envuelto en flores de loto de protección como los sobres. A veces los que estaban en la barca-Mesktet colaborado con Horus, otras veces la Mandjet-barca con su tripulación ayudó a revelar el dios: Djed plantea su cuerpo, una forma suprema de culto, asistente del dios del prestigioso ka".


Contexto: el Templo de Hathor en Déndera



Déndera era el centro de culto principal de Hathor, pero también se adoraba allí a su marido Horus de Edfu, Horus el Mayor y, su hijo, Ihi, también identificado con Hor-semtaui, el joven (su nombre significa “Aquel que unificó las Dos Tierras”).

Se cree que hubo un templo allí desde el Periodo Predinástico (5500 – 3150 a.C.), pero el templo que hoy se visita data del Periodo Grecorromano (332 a.C. – 395 d.C.), probablemente comenzado durante el reinado de Ptolomeo XII.

Destaca la decoración que representa motivos astronómicos, con Nut dando a luz el Sol en la sala hipóstila exterior y la representación de la interpretación del cielo mediante un zodíaco a través de un modelo circular.



Nut engullendo y dando a luz al sol, un proceso que, según las creencias, se llevaría a cabo cada día.



              Zodíaco de Déndera. Representación del cielo desde la concepción egipcia.

Cuando accedemos a las criptas, encontramos paredes decoradas con bellos bajorrelieves. Esto parece que se usó como lugar de almacenamiento y, probablemente, la abundante decoración sea un comentario de la naturaleza variada de los recipientes rituales y estatuas de culto allí guardadas. Por lo que se destinó al mantenimiento del culto, archivos y emblemas mágicos, siendo el objeto más importante la estatua del ba de la diosa.



El huevo




El contenedor se trata, efectivamente, de un huevo, un símbolo presente en muchas mitologías como símbolo de la creación planteada desde el comienzo (Biedermann, 1996), relacionándose con el creador, la creación repetida del mundo y la inmortalidad.

Es un receptáculo cerrado y misterio del que surgía la vida, como un útero, pero vinculado a la divinidad, como un emblema de la vida en potencia, ya que en el no intervenía otro elemento. De este modo nacía el dios Sol.

El hecho de un cascarón protector, dentro del que se producían una metamorfosis de forma oculta, produjo una gran fascinación en el pensamiento egipcio. En los orígenes de la civilización (existen ejemplos ya en los Textos de las Pirámides) se relacionó con los aspectos primordiales de la divinidad. El momento en el que la criatura rompía el cascarón se identificó con la consciencia, el surgimiento del creador y el momento en el que comenzaba la creación del universo ordenado.

No solo fue Ra el que salía de un huevo sino que dioses como Nefertum, que normalmente nacía de un loto, o el nombrado Hor-semtauy, podían ser representados surgiendo del mismo lugar.


La flor de loto




Su simbolismo se debió a las características naturales de la flor: se cierra durante la tarde, se sumerge poco a poco en las aguas durante la noche y, por la mañana, “renace” abriéndose en dirección al sol. Por tanto, tiene una vinculación con el aspecto solar y se relaciona con las aguas primigenias y el origen de la vida.

Así, uno de los mitos de la creación describió como el Sol había surgido, por primera vez, del interior de esta flor. De este modo, dioses relacionados a este contexto, a destacar Nefertum, se representaron naciendo de un loto.

Por lo tanto, este icono es frecuente encontrarlo en el contexto de la creación del mundo y dentro de la iconografía de las deidades asociadas a este contexto, surgiendo de la flor.


La serpiente



















La serpiente tiene multitud de connotaciones, desde contextos agrarios, celestiales, referentes a las aguas primordiales, etc. Por lo tanto, puede aparecer asociado a multitud de deidades, como es el caso. En este contexto se entiende como símbolo del principio dualista subyacente en toda la creación, como en el Génesis la separación del cielo y la tierra (West, 1985).


Hor-semtauy


Hor-semtauy (Harsomtus en griego) fue un dios venerado, principalmente, en Dendera, Edfú y Heracleopolis, representado normalmente con forma de niño, pero también toma el aspecto de momia con cabeza humana, hombre con cabeza de serpiente u halcón coronado con plumas y disco solar. Sin embargo, tiene una manifestación animal en forma de serpiente emergiendo de un loto.


Diferentes representaciones de Hor-semtauy 

En Dendera se encuentra bajo tres formas distintas (según S. Cauville, 1991) y está identificado a Ihy, un dios patrono de la música, al igual que Hathor. Se manifiesta en una forma derivada de Horus el Viejo, “Señor de Dendera”, aunque su incorporación al mito se habría hecho con posterioridad.

Su relación con el loto nace de la observación de sus características en la naturaleza (que ya hemos comentado arriba). Su comportamiento lo identificó con el curso diario del Sol y lo relacionado con el Horus solar, que compartió el mismo mito.

Su nombre significa “Horus Unifiacdor de las Dos Tierras” y en tal aspecto está fusionado a Harpócrates. Por lo tanto, no es más que una asociación de dos dioses distintos: Horus y Somtus. Este último tiene forma de niño sobre una flor de loto y tocado con la corona hemhem, con forma de serpiente o con forma de heracocéfalo con corona de dos plumas. Simboliza la creación, el momento en el que el Sol surge de la flor de loto emergida en las aguas primordiales. Enfatizada su función como dios primordial se manifiesta como una serpiente.


En conclusión...



Para leer un relieve egipcio hay que tener en cuenta la codificación artística egipcia y ello nos obliga también a tener en cuenta aspectos de la mitología y tradición egipcia. A través de los diferentes iconos que componen la imagen general podemos deducir que se está haciendo referencia al momento de la creación de la divinidad primigenia que daría lugar a la creación del mundo.

El loto es frecuente encontrarlo en tal contexto ya que la mitología establece que la deidad solar nace del loto que se abre a la mañana. El huevo haría referencia al nacimiento divino, con ese aspecto uterino, pero a la vez misterioso, sin dependencia de una fuerza externa. La serpiente sería una de las posibles formas documentadas de tal deidad que, además, entre sus aspectos se menciona el referente al aspecto dual de la creación del mundo.

En consonancia con ello se encuentra la advocación del templo, encontrándose entre los dioses que allí se veneraban.

Probablemente, el tema de interpretar esto como bombillas es un caso que podría haber ocurrido en cualquier contexto y en cualquier cultura. Hay un impulso irrefrenable por señalar diferentes manifestaciones como algo trascendental y revolucionario, aunque para ello deban pasarse por alto cuestiones obvias.

El problema no es este caso aislado. Los profesionales y aficionados serios de la egiptología conocen su verdadero significado porque saben cómo se debe interpretar algo así, el problema es la imagen que se está dando de la historia. Al divulgar estos temas damos una idea del pasado errónea, como un lugar plagado de gente falta de medios y atrasada en muchos aspectos, que debió contar con ayuda externa o secretos alquímicos para llevar a cabo su obra.

Sin embargo, la verdad es que no se trataba de gente muy diferente a la que puede haber hoy en día. Con otra cultura, pero con unos niveles de calidad y especialización en diferentes campos, ya sea el escultórico, arquitectónico, cultural, etc. que alcanzaron cotas extraordinarias y dignas de estudio. En el momento que todos comencemos a respetar a dicho pueblo, tal vez podamos comenzar a merecernos el legado que nos ha dejado.


BIBLIOGRAFÍA:

- Castel Ronda, E. (2009) Diccionario de signos y símbolos del Antiguo Egipto, Alderabán Ediciones, 265-268, 318-320
- Castel Ronda, E. (2009) Gran diccionario de mitología egipcia, Alderabán Ediciones, 138-139, 408-409
- Manuel Miguel (2017), "Templo de Hathor en Dendera". Blogger.com: 
http://artehistoriaegipto.blogspot.com.es/2017/02/templo-de-hathor-en-dendera.html
- West, J. A. (1985). The Traveler's Key to Ancient Egypt. Revised: A Guide to the Sacred Places of Ancient Egypt. Quest Books, 402.

Add Comment
Otros, xNuevo
domingo, 25 de febrero de 2018

Share

Like

G+

Tweet

Tweet

Entradas Relacionadas

Newer Older Home

Entradas Populares

  • Cosmogonías egipcias: el argumento, las precuelas y el reboot.
  • El Quirónomo: ¿Notación musical en el antiguo Egipto?
  • El "Ojo de Osiris" ¿la pervivencia de un amuleto egipcio en Malta?
  • British Museum: 14 piezas egipcias que no deberías perderte
  • Análisis iconográfico de las "bombillas" de Déndera
  • Teoría musical faraónica
  • Estudio de la colección egipcia del Museo de Pontevedra
  • 5 Curiosidades del Antiguo Egipto #4
  • Sexualidad y Erotismo en las las tumbas nobiliarias del Reino Nuevo
  • ¿Jugar con el antiguo Egipto? [Reflexión]

Copyright © 2014 El Escriba Frustrado All Right Reserved . Blogger Templates Design by Arlina . Powered by Blogger